(L) Los adictos al juego presentan anomalías en la función cerebral que afectan su capacidad de toma de decisiones (2013)

Los adictos al juego presentan anomalías en la función cerebral que afectan su capacidad para tomar decisiones

Investigadores de la Universidad de Granada han analizado las similitudes y diferencias en el perfil psicológico y la función cerebral al comparar adictos a la cocaína y adictos al juego. El estudio revela que los adictos al juego presentan anomalías en la función cerebral que afectan su capacidad de toma de decisiones.

En dos artículos, recientemente publicados en Fronteras en Neurociencias, confirman que la cocaína tiene efectos perjudiciales acumulativos en el funcionamiento de las áreas del cerebro (cingulado anterior y parte de la la corteza prefrontal) necesario para el correcto control de los impulsos. Esto se ha comprobado mediante tareas de laboratorio y técnicas que identifican anomalías. la función cerebral Mediante electroencefalografía (EEG).

Sin embargo, estos efectos negativos sobre el control correcto de los impulsos no estaban presentes en los jugadores, ya que su adicción no implica el uso de sustancias tóxicas. La investigación, realizada en la Universidad de Granada, muestra que las personas adictas al juego presentan otras anomalías de la función cerebral en áreas de la corteza prefrontal. Estos están relacionados con la gravedad de su aflicción y afectan su capacidad para tomar decisiones.

Las emociones negativas

Los autores principales, el profesor José César Perales y la investigadora Ana Torres —del Departamento de Psicología Experimental de la Universidad de Granada— explican que “estas malas decisiones afectan la capacidad de los individuos para reconocer y evaluar la pérdida, incluso cuando ésta no sea una pérdida económica”. Además, entre los voluntarios que participaron en la investigación también encontraron que la tendencia a tomar malas decisiones Incrementó significativamente cuando experimentaron. las emociones negativas como la ansiedad o la tristeza.

De los datos recogidos han derivado “pautas prácticas de uso directo en el tratamiento psicológico de ambas adicciones”. En primer lugar, hay que tener en cuenta que las anomalías provocadas por el consumo crónico de cocaína pueden a su vez obstaculizar el tratamiento y, por tanto, deben tenerse en cuenta a la hora de establecer un pronóstico.

En segundo lugar, los investigadores han identificado problemas clave que el tratamiento orientado a la rehabilitación para juegos patológicos debe incluir, especialmente en los casos más graves: tratar directamente los problemas emocionales que provocan la necesidad de apostar y someterse a una capacitación específica que permita al individuo evaluar adecuadamente las pérdidas y sus consecuencias.