Anomalías estructurales del cerebro en el sistema frontostriatal y cerebelo en la pedofilia (2007)

COMENTARIOS: Las adicciones a las drogas, las adicciones a la comida y el juego patológico comparten cambios cerebrales comunes. Un cambio importante es la disminución del volumen y el metabolismo de la corteza frontal, lo que se denomina hipofrontalidad. Este estudio muestra que los pedófilos también tienen hipofrontalidad. La pedofilia se considera algo así como un trastorno obsesivo-compulsivo, y el TOC comparte varios puntos en común con las adicciones. A partir de esta publicación, nadie ha realizado escáneres cerebrales de adictos a la pornografía. Sin embargo, este estudio indica que la compulsión sexual puede causar hipofrontalidad, que se observa en todas las adicciones.

J Psychiatr Res. 2007 Nov; 41 (9): 753-62. Epub 2006 Jul 31.
Schiffer B, Peschel T, Paul T, Gizewski E, Forsting M, Leygraf N, Schedlowski M, Krueger TH.

Fuente
Departamento de Psiquiatría Forense, Hospital Universitario de Essen, Universidad de Duisburg-Essen, Virchowstrasse 174, D-45147 Essen, Alemania. [email protected]

Compendio

Aunque los estudios neuropsicológicos anteriores y los informes de casos clínicos han sugerido una asociación entre la pedofilia y la disfunción frontocortical, nuestro conocimiento sobre los mecanismos neurobiológicos subyacentes a la pedofilia es aún fragmentario. Específicamente, la morfología cerebral de tales trastornos aún no se ha investigado mediante técnicas de RM.
Las imágenes de RM ponderadas por T1 estructurales de todo el cerebro de pacientes pedófilos de 18 (9 atraído por hombres, 9 atraídos por mujeres) y 24 sujetos de control emparejados por edad sanos (12 hetero y 12 homosexual) de un estrato socioeconómico comparable se procesaron utilizando un automatizado optimizado. Morfometría basada en voxel dentro de análisis de regresión lineal múltiple.
En comparación con los sujetos de control homosexuales y heterosexuales, los pedófilos mostraron una disminución del volumen de la materia gris en el estriado ventral (que también se extiende hacia el núcleo accumbens), la corteza orbitofrontal y el cerebelo. Estas observaciones indican además una asociación entre las anomalías morfométricas frontostriatales y la pedofilia. En este sentido, estos hallazgos pueden apoyar la hipótesis de que existe un mecanismo etiopatológico compartido en todos los trastornos del espectro obsesivo-compulsivo.