Un estudio muestra que las escenas tranquilas tienen un impacto positivo en el cerebro

14 de septiembre de 2010 en Medicina y salud / NeurocienciaEl tiempo en la naturaleza puede aliviar los síntomas de abstinencia de la adicción a la pornografía.

Los ambientes de vida tranquilos pueden afectar positivamente la función cerebral humana, según investigadores de la Universidad de Sheffield.

La investigación, que fue publicada en la revista NeuroImage, utiliza imágenes cerebrales funcionales para evaluar cómo el ambiente afecta a nuestras funciones cerebrales.

Los hallazgos demostraron que las escenas ambientales tranquilas que contienen características naturales, como el mar, hacen que distintas áreas del cerebro se 'conecten' entre sí, mientras que los entornos artificiales, como las autopistas, interrumpen las conexiones cerebrales.

La investigación involucró a académicos de la Unidad Académica de Psiquiatría Clínica, Radiología Académica y la Escuela de Arquitectura de la Universidad, junto con la Escuela de Ingeniería, Diseño y Tecnología de la Universidad de Bradford y el Instituto de Medicina y Neurociencia de Jülich, Alemania. El equipo llevó a cabo un escaneo funcional del cerebro en la Universidad de Sheffield para examinar la actividad cerebral cuando a las personas se les presentaban imágenes de escenas tranquilas de playa y escenas de autopistas no tranquilas.

Utilizaron el hecho de que las olas que rompen en una playa y el tráfico que se mueve en una autopista producen un sonido similar, percibido como un rugido constante, y presentaron a los participantes imágenes de escenas de playas tranquilas y escenas de autopistas no tranquilas mientras escuchaban el mismo sonido. Asociado a ambas escenas.

Usando un escaneo cerebral que mide la actividad cerebral, mostraron que las escenas naturales y tranquilas causaron que diferentes áreas del cerebro se 'conectaran' entre sí, lo que indica que estas regiones del cerebro estaban trabajando en sincronía. Sin embargo, las escenas no tranquilas de la autopista interrumpieron las conexiones dentro del cerebro.

El Dr. Michael Hunter, del Laboratorio de Cognición y Neuroimagen de Sheffield (SCANLab) con sede en Psiquiatría Clínica Académica dentro del Departamento de Neurociencia de la Universidad de Sheffield, dijo: “Las personas experimentan la tranquilidad como un estado de calma y reflexión, que es reconstituyente en comparación con los efectos estresantes de atención sostenida en el día a día. Es bien sabido que los entornos naturales inducen sentimientos de tranquilidad, mientras que los entornos urbanos artificiales se experimentan como no tranquilos. Queríamos entender cómo funciona el cerebro cuando percibe entornos naturales, para poder medir su experiencia de tranquilidad ”.

El profesor Peter Woodruff, de SCANLab, dijo: “Este trabajo puede tener implicaciones para el diseño de espacios públicos y edificios más tranquilos, incluidos los hospitales, porque proporciona una forma de medir el impacto de las características ambientales y arquitectónicas en el estado psicológico de las personas. El proyecto fue un esfuerzo de colaboración real, que reunió a investigadores de Psiquiatría, Radiología y Arquitectura de la Universidad de Sheffield, así como Ingeniería de la Universidad de Bradford y el Instituto de Medicina y Neurociencia de Jülich, Alemania ”.

Un estudio muestra que las escenas tranquilas tienen un impacto positivo en el cerebro.